lunes, 8 de octubre de 2012

Sigue la pista del dinero

Hace años vi con mucho interés un programa de televisión sobre el Triángulo de las Bermudas. Discutían muchas teorías sobre fenómenos físicos que pudieran causar la desaparición de barcos y aviones en esa zona. Al final del programa entrevistaron a directivos de la compañia Lloyds, que se dedica a aegurar barcos (las empresas enormes como PEMEX compran seguros multimillonarios para sus barcos, de la misma forma que nosotros compramos seguros para nuestros coches, de tal manera que No pierdan todo si tienen un accidente). Los directivos de esta multimillonaria empresa de seguros declaraon que ellos cobran igual sus seguros a los barcos que viajan por el Triángulo de las Bermudas que a los barcos que viajan por otros lados, porque en su experiencia (esta compañia existe desde hace más de trescientos años) la cantidad de accidentes y desparaciones de barcos en el Triángulo de las Bermudas es la misma que en cualquier otra parte de los Oceanos. Para mí, eso es suficiente evidencia de que el Triángulo de las Bermudas es una zona común y corriente del Oceano, ¿qué mejor evidencia que donde ponen los ricachones su dinero?. Desde mi punto de vista, las propuestas sobre lo que pasa en el Triangulo de las Bermudas son divertidas e interesantes, como es divertida e interesante la película de la Guerra de las Galaxias. Aunque me encanta esa película, yo nunca me pondré a entrenar como Yoda para mover objetos con la mente. En esa misma categoría tengo para mí la información sobre la telepatía y el supuesto papel de la resonancia Schumann: divertida e interesante, pero si quiero comunicarme con mi esposa cuando se va de viaje, yo no voy a intentar poner mis ondas alfa en resonancia con la oscilacion del campo magnético terrestre. Para comunicarme con mis familiares yo uso un teléfono, o el facebook. Cuando yo vea a TELMEX y a Televisa pelearse por el control de la resonancia Schumann (como ahora se pelean por el control de las señales de radio), entonces creeré que hay evidencia de su papel en la telepatía. Como dicen en las buenas novelas policiacas, sigue la pista del dinero.